Accesibilidad en la ciudad

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Por FRED Ramírez Moreno

Accesibilidad en la ciudad: Un reto pendiente en Colombia y América Latina


Por Fred Ramírez Moreno


La accesibilidad en el entorno urbano es un derecho fundamental para las personas con discapacidad, pero sigue siendo un tema que avanza a paso lento en muchas ciudades de países en desarrollo como Colombia. Mientras que las grandes capitales de departamentos muestran algunos avances, las pequeñas ciudades parecen quedar rezagadas, perpetuando la exclusión y las barreras en el día a día de quienes más dependen de espacios inclusivos.

Contrastes entre realidades

Tuve la oportunidad de vivir un año en Vancouver, Canadá, una ciudad que ha perfeccionado su diseño urbano para garantizar la accesibilidad. Desde andenes uniformes con rampas que se nivelan perfectamente con el pavimento hasta sistemas de transporte público completamente adaptados, Vancouver demuestra que es posible construir una ciudad verdaderamente inclusiva. Como usuario de silla de ruedas, me movía con libertad, algo que lamentablemente no puedo experimentar en muchas ciudades de mi país, como Ibagué, la ciudad en la cual vivo, que ni siquiera su sistema de transporte ofrece la mínima posibilidad de hacer uso de ella.

En América Latina, las personas con discapacidad enfrentan barreras constantes en múltiples aspectos de la vida:

  • Acceso limitado a la educación: Muchas instituciones carecen de infraestructura adecuada.

  • Pobreza y exclusión económica: Las oportunidades laborales son significativamente menores.

  • Entornos inaccesibles: Calles sin rampas, transporte público inaccesible y edificios no adaptados son la norma.

¿Por qué falta tanto?

El problema no es solo técnico o económico, sino también cultural. La falta de concientización sobre la importancia de la inclusión lleva a que las ciudades inviertan en obras que no consideran las necesidades de todos sus ciudadanos. Aunque existen marcos legales y normas que promueven la accesibilidad, su aplicación en muchos casos es deficiente o nula.

Hacia ciudades inclusivas

Para que nuestras ciudades sean más accesibles, necesitamos:

  1. Normas efectivas y claras: Legislación que garantice la accesibilidad en todos los espacios públicos y privados.

  2. Supervisión y cumplimiento: Las autoridades deben fiscalizar la correcta aplicación de estas normas.

  3. Educación y sensibilización: Promover una cultura de inclusión y respeto hacia las personas con discapacidad.

  4. Inversión estratégica: Priorizar obras públicas y privadas que beneficien a toda la ciudadanía.


Un llamado a la acción

Los países desarrollados nos llevan años luz en términos de accesibilidad e inclusión, pero esto no debe desalentarnos. Debemos tomar inspiración de estos modelos y adaptarlos a nuestra realidad. Como sociedad, debemos reconocer que las ciudades accesibles no solo benefician a las personas con discapacidad, sino que enriquecen la calidad de vida de todos.

El cambio comienza con cada uno de nosotros, exigiendo mejores políticas públicas, diseñando proyectos más inclusivos y promoviendo una mentalidad abierta hacia la diversidad. ¿Cómo podemos contribuir desde nuestra posición? Es una pregunta que todos deberíamos hacernos.

Conclusión

La accesibilidad no es un lujo, es un derecho. Es hora de que nuestras ciudades reflejen este principio y se conviertan en espacios inclusivos para todos. ¿Tu ciudad es accesible? ¿Qué cambios crees que necesita para serlo? Compártelo en los comentarios y sigamos construyendo un entorno más inclusivo.